Referentes católicos y evangélicos de Honduras instan a votar masivamente, cuidar el proceso y aceptar resultados para vivir una jornada electoral en paz.
Líderes cristianos de Honduras emitieron mensajes enfocados en la participación masiva, el respeto al proceso y la esperanza, en el marco de las elecciones generales de este domingo 30 de noviembre, a las que fueron convocados más de 6.5 millones de hondureños.
El padre Juan Ángel López, portavoz de la Conferencia Episcopal de Honduras, pidió que este domingo de Adviento sea “un domingo de esperanza” para el país.
Señaló que las crisis de todo tipo que ha vivido Honduras han generado “desesperaciones y desesperanzas”, pero insistió en que estas pueden superarse “orando, poniéndonos en manos de Dios para que Él rija nuestras decisiones y destinos”.
El sacerdote hizo un fuerte llamado a la participación ciudadana: “Vayamos a votar masivamente porque eso acalla a quienes hacen bulla de fraude y relajos”.
También exhortó a cuidar el voto, mantenerse vigilantes en las Juntas Receptoras de Votos y conocer cómo quedan las actas. Finalmente, instó a los candidatos a aceptar los resultados: “No haríamos bien al país creando caos ni hablando anticipadamente de fraude. En democracia a veces se gana y a veces se pierde”.
Por su parte, el arzobispo de Tegucigalpa, Vicente Nácher Tatay, encomendó al país a Dios durante esta jornada, pidiendo que Él “guíe y acompañe a los hondureños que acudirán a las urnas, y que lo hagan con paz y alegría”.
Pedir sabiduría para elegir a los mejores
Desde el sector evangélico, el presidente de la Confraternidad Evangélica de Honduras, Gerardo Irías, llamó a los ciudadanos a ejercer el sufragio “con responsabilidad, sabiduría y discernimiento”.
También instó a la ciudadanía a salir “masivamente, sin temores”, recordando que esta es la oportunidad de elegir a las nuevas autoridades del Ejecutivo, alcaldías y Congreso Nacional. Pidió que la población elija “personas temerosas de Dios, con principios y capacitadas para gobernar”.
Los mensajes convergen en un llamado común: vivir unas elecciones pacíficas, conscientes y orientadas al bien del país.
